dimarts, de maig 22, 2007

Una cultura refugiada. Nuevos yacimientos en el Sahara Occidental

Un tesoro histórico escondido en el desierto, un museo abierto las 24 horas del día bajo el sol del desierto. Puede ser el más grande del mundo, y sin duda alguna, es uno de los yacimientos prehistóricos más importantes de la historia de la humanidad.

Dentro de la colaboración y cooperación entre el Ministerio de Cultura Saharaui y la Universidad de Girona, se ha realizado entre el 14 de abril y el 5 de mayo, la expedición más importante llevada a cabo en el Sahara occidental en la zona de los territorios liberados en estos últimos año. Han sido tres semanas de trabajo y más de 3500 kilómetros de recorrido, desde el sur de Leyoad, el corazón de Tiris hasta Gleib Dirit en el norte de Tifariti a unos 110 kilómetros de distancia.


Un grupo integrado por arqueólogos, antropólogos, museólogos de la Universidad de Girona y la Universidad Autónoma de Barcelona y guías Saharauis y con la ayuda imprescindible del ejercito saharaui, así como la ayuda de los hijos de los nubes, los nómadas del desierto, se ha podido realizar este importante trabajo de investigación, estudios y excavación en muchos de los lugares visitados. Sin embargo, en otros lugares el obstáculo vuelven a ser las minas enterradas por todas partes.


Hay que destacar el valor y el compromiso humano de estos hombres y mujeres comprometidos, con un espíritu científico pero sobre todo humano, que ponen en peligro su vida para ayudar a un pueblo a tener su memoria y su tesoro histórico vivo, conservado y protegido para las nuevas generaciones. Ojalá que algún día podamos agradecer no solamente a ellos, sino a todos los que han dedicado su tiempo a trabajar, para que el pueblo saharaui pueda tener bien conservada su identidad cultural.


Algunos de los trabajos más destacados realizados en la zona de Leyoad en el Tiris, han sido las investigaciones y estudios en la Cueva del Diablo, Cueva pintada, Heizch, Baten el Calba, y Sreiba, así como la excavación en una de las cuevas de Leyoad, donde se ha encontrado carbón de gran importancia, que seguramente puede determinar muchos datos de gran interés, así como algunas espinas de pescado y mejillones que fueron encontrados en la misma excavación. También fueron localizados otros lugares que serán estudiados en otras ocasiones.


En la zona de Zamur, la tierra de las cuevas pintadas y los grabados al aire libre, en su cuna Mheiriz, fuimos recibidos por un auténtico saharaui, jefe de la cuarta región militar del frente POLISARIO, el señor Mostafa Sidi EL Bachir ha sido verdaderamente un ejemplo digno de la buena hospitalidad saharaui.


Después de una larga reunión familiar sobre el papel que pueden jugar los militares de su región militar en cuanto a la conservación y protección de estos yacimientos que se encuentran en la región de Mheiriz , así como la localización de nuevos yacimientos, el señor Mostafa a pesar de su interés personal por estos yacimientos se ofreció a ser nuestro guía, su experiencia y su dominación total del terreno ha sido un factor muy importante para ganar mucho tiempo en un largo recorrido en Mheiriz, desde lugares recién descubiertos por militares en las cuevas pintadas en Rqueiz Rgueua. Otros, como una cadena larga de Panteones donde puedes contemplar un paisaje único desde una altura muy elevada, incluso tumbas de distintas formas, algunas lunares, hasta viejos monumentos que parecen juegos de niños, conocidos por avispas; estos monumentos fueron descubiertos por los primeros pilotos españoles en el Sahara, lo utilizaban como referencias de algunos lugares.


Dentro del programa de conservación y protección de los yacimientos prehistóricos, el Ministerio de Cultura Saharaui se llegó a la conclusión de que estos yacimientos recién encontrados estarán protegidos y no abiertos para visita, hasta que terminan los estudios de investigación científicos y también para evitar su deterioro por algunas visitas como en el caso de Rqueiz.


Estos yacimientos recién encontrados se consideran los más importantes del Sahara occidental en la zona de Mheiriz, por esta razón hemos evitado dar por el momentos más información en cuanto al lugar y las coordenadas.

Esperamos que en un futuro cercano puedan ser un lugar de visitas para todos, siempre y cuando la visita esté organizada por el Ministerio de cultura o el Protocolo de la RASD.


Entre Gleib y uad Dirit se han realizado otros trabajos de expedición que han dado otros resultados muy interesantes. Los grabados más importantes de esta zona fueron encontrados entre Buer Dib y Breiga a una distancia aproximada de 10 kilómetros a 30 kilómetros de este lugar a dirección a los campamentos de refugiados, en un lugar conocido por Karfasiyat Achuhada se han encontrado otros grabados dispersos en una longitud de más de 5 kilómetros, estilo de Esluguiya, donde también se han realizado otros trabajos de investigación y estudios. .


Esluguiya, el último lugar de visita de trabajo, así como nuestro último te de este viaje, cerca de la tumba de el santo Muolud, conocida por Sluguiyit Moulud.


Todos estos resultados obtenidos en este viaje demuestran la importante riqueza cultural del Sahara occidental, un territorio que alberga esta diversidad cultural, que ocultaba el desierto en su interior a lo largo de estos años. Este conflicto armado también ha sido una de los razones que no ha facilitado este tipo de trabajos de investigación en el Sahara occidental en estos últimos años, así como este muro que divide esta tierra, como divide también a su fauna, su flora, a su población y que continúa siendo el mayor obstáculo del trabajo de estos hombres y mujeres.


Es muy evidente que el pueblo saharaui en estos momentos y por las circunstancias del exilio no puede dedicar su mayor tiempo a luchar contar la naturaleza y otros elementos para conservar estos yacimientos históricos, a pesar de su importancia cultural, y especialmente en el futuro, debido a otras prioridades como las necesidades primordiales para la población refugiada en los campamentos. Pero el Ministerio de Cultura Saharaui deposita su total confianza en todas las universidades y organizaciones que quieran trabajar y aportar cualquier tipo de ayuda para conservar este tesoro histórico, para que algún día pueda ser un patrimonio de la humanidad y para que la comunidad internacional no tenga que conocer el pueblo saharaui por su situación política, sino también por su riqueza cultural.


Brahim Cheij Breih

Encargado de Cooperacion

Ministerio de Cultura Saharaui