Us reprodueixo el comunicat de FEDISSAH en el que es critica la posició del govern d'Espanya respecte el Sàhara Occidental, després de la cimera Marroc / Espanya. És un comunicat prou clar i entenedor. Cal pressionar perque el govern de l'estat torni a la legalitat internacional, perque torni a reconèixer el dret dels sahrauís a l'autodeterminació.
El comunicat és el següent:
El comunicat és el següent:
FEDISSAH / FEDERACIÓN ESTATAL DE INSTITUCIONES SOLIDARIAS CON EL PUEBLO SAHARAUI
ZAPATERO CAMBIA LA POSICIÓN QUE MANTENÍA ESPAÑA DESDE EL INICIO DE LA DEMOCRACIA SOBRE EL CONFLICTO DEL SÁHARA OCCIDENTAL
ESPAÑA VUELVE A TRAICIONAR AL PUEBLO SAHARAUI
Los peores augurios se han confirmado. El Gobierno Español y su presidente han confirmado lo que el Movimiento de Solidaridad con el Pueblo Saharaui venía repitiendo en sus últimos pronunciamientos, el abandono por parte de España de lo que ha sido su política con respecto al conflicto del Sáhara Occidental desde el inicio de la democracia.
La ambigüedad calculada, las abstenciones en Naciones Unidas, las frases huecas de la diplomacia española desde que Moratinos es Ministro de Asuntos Exteriores y Zapatero, Presidente del Gobierno, han acabado en un vuelco espectacular y gratuito de la posición “tradicional” de España con respecto a su antigua colonia.
El entreguismo de Zapatero a Mohamed VI en la recientemente celebrada cumbre de los dos países, ha sido total y absoluta.
España ha modificado su política exterior en lo relativo al Sáhara Occidental de un plumazo y que se sepa, sin exigir nada a cambio. Lo ha hecho sin red de seguridad, o no, pero en cualquier caso utilizando el Sahara Occidental como moneda de cambio en sus relaciones con Marruecos.
Se veía venir. El último “gesto” del Gobierno Español de rearmar al ejército marroquí, conocido hace poco, pero producido ya hace meses, y que constituye una burla a las resoluciones de la ONU y al alto el fuego vigente, además de una afrenta a la posición de la inmensa mayoría de la opinión pública española, ha dado ya sus frutos para Marruecos, que no se podía ni imaginar que pudiera conseguir tanto sin ofrecer nada a cambio.
En el comunicado oficial de la RAN, Marruecos no ha aceptado siquiera que se incluyera el derecho del Pueblo Saharaui a decidir por sí mismo.
¿Dónde ha quedado el apoyo del Gobierno de España al derecho a la autodeterminación del Pueblo Saharaui?, consagrado en todas y cada una de las resoluciones de las Naciones Unidas sobre el Sáhara Occidental. Significan las palabras del Presidente del Gobierno y del Ministro de Asuntos Exteriores, que España se sitúa fuera de la legalidad internacional en este asunto, que ya no es la ONU la depositaria y garantía de que ese derecho reconocido del Pueblo Saharaui se abra camino.
Mostrar “aprecio” y “gran interés” por la propuesta marroquí (un supuesto plan de autonomía para el Sáhara), que por cierto nadie conoce, no es nueva, sino más de lo mismo y que ya fue rechazada por Naciones Unidas en 2003, es lisa y llanamente “legitimar la ocupación ilegal marroquí del Sáhara Occidental”.
Cualquier propuesta que se sitúe fuera del marco de la legalidad internacional no puede ser tenida en cuenta y mucho menos apoyarse y pensar que puede servir de “cauce” para “retomar el diálogo” entre las partes.
Nadie con sentido común, no ya de estado, puede creer que esta estratagema de Marruecos es creíble y seria, sino un nuevo canto de sirenas para huir de sus responsabilidades y compromisos, siempre incumplidos.
El Presidente de Gobierno con este golpe de timón, como lo ha calificado un líder político, ha puesto a España contra las cuerdas y ha hipotecado la libertad de nuestro país en el futuro, en vez de liderar una solución juta y duradera, como se le ha reclamado en numerosas ocasiones, sobre la base de soluciones ya acordadas por la Comunidad Internacional, Plan de arreglo de 1991 y Plan Baker.
¿Qué pasará si la cacareada, pero desconocida propuesta marroquí para el Sáhara, es como la anterior nuevamente rechazada por Naciones Unidas? ¿Qué dirá entonces el Gobierno de España?, ¿Qué carta le quedará por jugar? Conviene preguntarse por qué “nuestro” Presidente y el Jefe de la Diplomacia Española, - que por cierto es el primer Ministro de Asuntos Exteriores de la democracia que no ha recibido nunca a representantes del Movimiento de Solidaridad con el Pueblo Saharaui; pese a la insistencia y a las numerosas peticiones de entrevista,- han llegado tan lejos en su apoyo incondicional a Marruecos en esta cuestión.
Una vez mas le tenemos que decir a ambos, como le hemos repetido en numerosas ocasiones, que el conflicto del Sáhara Occidental es una cuestión de descolonización no concluido por la actitud de obstrucción del Gobierno de Marruecos, con la permisividad de la Comunidad Internacional (O.N.U. y U.E), el apoyo explícito del Gobierno de Francia y la no asunción de los diferentes Gobiernos de España de su responsabilidad política como antigua potencia colonial. Por tanto debe culminar con un referéndum de autodeterminación con todas las garantías democráticas y de libertad.
El derecho de autodeterminación lo tiene reconocido el Pueblo Saharaui a través de múltiples resoluciones de la O.N.U., la U.E. y la U.A. El marco más reciente para resolver este conflicto lo ha fijado la O.N.U. en su resolución 1495 del 31 de julio de 2003, conocida como Plan Baker, aprobada por unanimidad en el Consejo de Seguridad y aceptada por el Frente Polisario. Sin embargo el gobierno de Marruecos impide su aplicación, vulnerando la legalidad internacional y propiciando una situación en la región de inestabilidad e inseguridad.
A pesar de las múltiples resoluciones, el conflicto del Sáhara Occidental está en una situación de bloqueo y estancamiento por la premeditada obstrucción del Gobierno Marroquí. Por tanto, cualquier propuesta que se aleje de la exigencia del Referéndum de Autodeterminación a la administración marroquí, sitúa el conflicto en un callejón sin salida. Hay que recordar que Marruecos es la fuerza de ocupación y no está legitimada para presentar propuestas. Lo que debe hacer es acatar las resoluciones de la Comunidad Internacional.
Desbloquear el tema sólo se puede hacer a través de la exigencia, con firmeza, a Marruecos para que cumpla con la legalidad y respete el derecho inalienable del Pueblo Saharaui a su autodeterminación
Que decir de los elogios al Reino Alauí en relación a los derechos humanos. ¿Cómo se puede elogiar el compromiso de Rabat con los derechos humanos y aceptar que en la declaración final de la RAN se hable de “compromiso sólido y permanente de Marruecos en materia de derecho humanos”, cuando ese mismo día, 6 de marzo, ocho presos políticos saharauis fueron desalojados a golpes de la sala que les pretendía juzgar, devueltos a la cárcel maniatados y encerrados en celdas incomunicadas y los escolares saharauis fueron un día más perseguidos y golpeados por la policía a la salida de los colegios.
Acaso Zapatero y Moratinos olvidaron en sus despachos la carta que Amnistía Internacional les hizo llegar unos días antes de su reunión con Marruecos, mostrando su preocupación por la violación de los derechos humanos en el Sáhara Occidental. En la misma se puede leer que “el Pueblo Saharaui tiene gravemente coartado el ejercicio de su derecho a expresar opiniones, a crear asociaciones y a celebrar reuniones”. “A lo largo del último año y medio, la comunidad saharaui ha sido objeto de una campaña coordinada de represión en manos de las autoridades marroquíes”, sigue la carta de Amnistía Internacional.
La situación de ocupación ilegal durante más de 30 años por Marruecos de los territorios del Sáhara Occidental solo ha sido posible por una acción permanente de represión sobre el pueblo saharaui vulnerándose los derechos humanos de manera continuada: Detenciones arbitrarias, encarcelamientos, desapariciones, torturas, juicios sin garantías, prohibición de manifestaciones o de asociación, y un largo etc. que ha creado una situación explosiva en todo el territorio.
Aunque no sirva de nada queremos hacer un nuevo y urgente llamamiento al Gobierno de España, a que rectifique y apoye sin matices las resoluciones de la ONU sobre el Sáhara Occidental y el derecho del Pueblo Saharaui a la autodeterminación e independencia. También le pedimos que paralice los “contratos” de venta de armas a Marruecos, que suponen reforzar la brutal represión en el Sáhara Occidental y contribuyen poderosamente a agravar la tensión en la zona del noroeste africano y desestabilizarla.
De lo contrario declararemos a este Gobierno hostil al Pueblo Saharaui
Hacemos igualmente un llamamiento al conjunto de fuerzas políticas para que obliguen al Gobierno a rectificar su política con respecto al Sáhara Occidental.
A las Instituciones le pedimos que se movilicen contra esta política y aprueben mociones y comunicados de protesta. También pedimos a los Ayuntamientos, Cabildos y Diputaciones del Estado Español que apoyen y secunden las concentraciones y encierros simbólicos convocados para el próximo 9 de marzo para protestar enérgicamente por esta nueva traición cometida contra el Pueblo Saharaui.
La ambigüedad calculada, las abstenciones en Naciones Unidas, las frases huecas de la diplomacia española desde que Moratinos es Ministro de Asuntos Exteriores y Zapatero, Presidente del Gobierno, han acabado en un vuelco espectacular y gratuito de la posición “tradicional” de España con respecto a su antigua colonia.
El entreguismo de Zapatero a Mohamed VI en la recientemente celebrada cumbre de los dos países, ha sido total y absoluta.
España ha modificado su política exterior en lo relativo al Sáhara Occidental de un plumazo y que se sepa, sin exigir nada a cambio. Lo ha hecho sin red de seguridad, o no, pero en cualquier caso utilizando el Sahara Occidental como moneda de cambio en sus relaciones con Marruecos.
Se veía venir. El último “gesto” del Gobierno Español de rearmar al ejército marroquí, conocido hace poco, pero producido ya hace meses, y que constituye una burla a las resoluciones de la ONU y al alto el fuego vigente, además de una afrenta a la posición de la inmensa mayoría de la opinión pública española, ha dado ya sus frutos para Marruecos, que no se podía ni imaginar que pudiera conseguir tanto sin ofrecer nada a cambio.
En el comunicado oficial de la RAN, Marruecos no ha aceptado siquiera que se incluyera el derecho del Pueblo Saharaui a decidir por sí mismo.
¿Dónde ha quedado el apoyo del Gobierno de España al derecho a la autodeterminación del Pueblo Saharaui?, consagrado en todas y cada una de las resoluciones de las Naciones Unidas sobre el Sáhara Occidental. Significan las palabras del Presidente del Gobierno y del Ministro de Asuntos Exteriores, que España se sitúa fuera de la legalidad internacional en este asunto, que ya no es la ONU la depositaria y garantía de que ese derecho reconocido del Pueblo Saharaui se abra camino.
Mostrar “aprecio” y “gran interés” por la propuesta marroquí (un supuesto plan de autonomía para el Sáhara), que por cierto nadie conoce, no es nueva, sino más de lo mismo y que ya fue rechazada por Naciones Unidas en 2003, es lisa y llanamente “legitimar la ocupación ilegal marroquí del Sáhara Occidental”.
Cualquier propuesta que se sitúe fuera del marco de la legalidad internacional no puede ser tenida en cuenta y mucho menos apoyarse y pensar que puede servir de “cauce” para “retomar el diálogo” entre las partes.
Nadie con sentido común, no ya de estado, puede creer que esta estratagema de Marruecos es creíble y seria, sino un nuevo canto de sirenas para huir de sus responsabilidades y compromisos, siempre incumplidos.
El Presidente de Gobierno con este golpe de timón, como lo ha calificado un líder político, ha puesto a España contra las cuerdas y ha hipotecado la libertad de nuestro país en el futuro, en vez de liderar una solución juta y duradera, como se le ha reclamado en numerosas ocasiones, sobre la base de soluciones ya acordadas por la Comunidad Internacional, Plan de arreglo de 1991 y Plan Baker.
¿Qué pasará si la cacareada, pero desconocida propuesta marroquí para el Sáhara, es como la anterior nuevamente rechazada por Naciones Unidas? ¿Qué dirá entonces el Gobierno de España?, ¿Qué carta le quedará por jugar? Conviene preguntarse por qué “nuestro” Presidente y el Jefe de la Diplomacia Española, - que por cierto es el primer Ministro de Asuntos Exteriores de la democracia que no ha recibido nunca a representantes del Movimiento de Solidaridad con el Pueblo Saharaui; pese a la insistencia y a las numerosas peticiones de entrevista,- han llegado tan lejos en su apoyo incondicional a Marruecos en esta cuestión.
Una vez mas le tenemos que decir a ambos, como le hemos repetido en numerosas ocasiones, que el conflicto del Sáhara Occidental es una cuestión de descolonización no concluido por la actitud de obstrucción del Gobierno de Marruecos, con la permisividad de la Comunidad Internacional (O.N.U. y U.E), el apoyo explícito del Gobierno de Francia y la no asunción de los diferentes Gobiernos de España de su responsabilidad política como antigua potencia colonial. Por tanto debe culminar con un referéndum de autodeterminación con todas las garantías democráticas y de libertad.
El derecho de autodeterminación lo tiene reconocido el Pueblo Saharaui a través de múltiples resoluciones de la O.N.U., la U.E. y la U.A. El marco más reciente para resolver este conflicto lo ha fijado la O.N.U. en su resolución 1495 del 31 de julio de 2003, conocida como Plan Baker, aprobada por unanimidad en el Consejo de Seguridad y aceptada por el Frente Polisario. Sin embargo el gobierno de Marruecos impide su aplicación, vulnerando la legalidad internacional y propiciando una situación en la región de inestabilidad e inseguridad.
A pesar de las múltiples resoluciones, el conflicto del Sáhara Occidental está en una situación de bloqueo y estancamiento por la premeditada obstrucción del Gobierno Marroquí. Por tanto, cualquier propuesta que se aleje de la exigencia del Referéndum de Autodeterminación a la administración marroquí, sitúa el conflicto en un callejón sin salida. Hay que recordar que Marruecos es la fuerza de ocupación y no está legitimada para presentar propuestas. Lo que debe hacer es acatar las resoluciones de la Comunidad Internacional.
Desbloquear el tema sólo se puede hacer a través de la exigencia, con firmeza, a Marruecos para que cumpla con la legalidad y respete el derecho inalienable del Pueblo Saharaui a su autodeterminación
Que decir de los elogios al Reino Alauí en relación a los derechos humanos. ¿Cómo se puede elogiar el compromiso de Rabat con los derechos humanos y aceptar que en la declaración final de la RAN se hable de “compromiso sólido y permanente de Marruecos en materia de derecho humanos”, cuando ese mismo día, 6 de marzo, ocho presos políticos saharauis fueron desalojados a golpes de la sala que les pretendía juzgar, devueltos a la cárcel maniatados y encerrados en celdas incomunicadas y los escolares saharauis fueron un día más perseguidos y golpeados por la policía a la salida de los colegios.
Acaso Zapatero y Moratinos olvidaron en sus despachos la carta que Amnistía Internacional les hizo llegar unos días antes de su reunión con Marruecos, mostrando su preocupación por la violación de los derechos humanos en el Sáhara Occidental. En la misma se puede leer que “el Pueblo Saharaui tiene gravemente coartado el ejercicio de su derecho a expresar opiniones, a crear asociaciones y a celebrar reuniones”. “A lo largo del último año y medio, la comunidad saharaui ha sido objeto de una campaña coordinada de represión en manos de las autoridades marroquíes”, sigue la carta de Amnistía Internacional.
La situación de ocupación ilegal durante más de 30 años por Marruecos de los territorios del Sáhara Occidental solo ha sido posible por una acción permanente de represión sobre el pueblo saharaui vulnerándose los derechos humanos de manera continuada: Detenciones arbitrarias, encarcelamientos, desapariciones, torturas, juicios sin garantías, prohibición de manifestaciones o de asociación, y un largo etc. que ha creado una situación explosiva en todo el territorio.
Aunque no sirva de nada queremos hacer un nuevo y urgente llamamiento al Gobierno de España, a que rectifique y apoye sin matices las resoluciones de la ONU sobre el Sáhara Occidental y el derecho del Pueblo Saharaui a la autodeterminación e independencia. También le pedimos que paralice los “contratos” de venta de armas a Marruecos, que suponen reforzar la brutal represión en el Sáhara Occidental y contribuyen poderosamente a agravar la tensión en la zona del noroeste africano y desestabilizarla.
De lo contrario declararemos a este Gobierno hostil al Pueblo Saharaui
Hacemos igualmente un llamamiento al conjunto de fuerzas políticas para que obliguen al Gobierno a rectificar su política con respecto al Sáhara Occidental.
A las Instituciones le pedimos que se movilicen contra esta política y aprueben mociones y comunicados de protesta. También pedimos a los Ayuntamientos, Cabildos y Diputaciones del Estado Español que apoyen y secunden las concentraciones y encierros simbólicos convocados para el próximo 9 de marzo para protestar enérgicamente por esta nueva traición cometida contra el Pueblo Saharaui.
8 de marzo de 2007
FEDISSAH
FEDERACIÓN ESTATAL DE INSTITUCIONES SOLIDARIAS CON EL PUEBLO SAHARAUI
NIF: G81949653 - C/ Agastia, 19 bajo A. - 28027 Madrid - Teléf: 914033855 - Fax: 914033851
e-mail: Fedissah[at]fedissah.org
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